España es un país que ha pasado de vivir de un sector como la construcción a hacerlo del turismo, que es sin ninguna duda uno de los asuntos que merece una mayor repercusión en el interior de nuestras fronteras. España es un país que lo tiene todo para convertirse en la principal potencia turística del mundo y no cabe la menor duda de que eso se debe a nuestra variedad de climas (desde el mediterráneo al montañoso) o la variedad de culturas que se encuentran en nuestro interior. Desde luego, nadie duda de que nos encontramos en un enclave geográfico ideal para vivir del turismo.
Es cierto que hay ciudades que tienen una mayor facilidad para atraer turismo que otras. Una de las que más fuerza tiene en materia turística es la ciudad de Barcelona, que no solo tiene un clima perfecto y se encuentra al lado de la costa, sino que además tiene una historia de lo más importante a nivel nacional y continental y, por si fuera poco, dista a poca distancia de los Pirineos, una de las zonas de este país que tiene una mayor cantidad de visitantes. Nadie puede dudar que la Ciudad Condal cuenta con todos los elementos para ser una referencia turística a nivel europeo, ya no solo a nivel estatal.
Y, como es lógico, esta situación genera resultados que son la mar de positivos. Uno de ellos es el que refleja un artículo que fue publicado en la página web del diario La Vanguardia. En él, se indicaba que Barcelona había recibido, hasta marzo del pasado año, un 4’3% más de turistas extranjeros y que este tipo de público había gastado en la ciudad un 6’9% más. Es evidente que estos datos reflejan el buen momento a nivel turístico que tiene la ciudad y que propicia que Barcelona sea el estandarte del sector turístico nacional.
La página web de otro medio como lo es Metrópoli Abierta informaba de que los turistas de Barcelona son más que ayer pero menos que mañana, porque la ciudad cuenta con un margen de mejora que es considerable y que tenemos que tener en cuenta. Barcelona es una ciudad capaz de llamar la atención de cualquier tipo de persona y eso es lo que permite que surjan informaciones como a la que acabamos de hacer referencia. Desde luego, este tipo de noticias son las que nos confirman que estamos haciendo bien las cosas no solo en lo que respecta a la Ciudad Condal, sino también al resto de España.
Un destino cada vez más recomendado por la gente
Turistas de todo tipo llegan cada año a Barcelona y está claro que eso no ha pasado desapercibido para los empresarios que viven del turismo en la ciudad. Entre todos ellos, y en colaboración con el sector público que trabaja para la ciudad, se ha conseguido diseñar una oferta turística que perfectamente podría ser la mejor de España y una de las mejores de Europa. Y es que ese plan no solo engloba crear empresas que tengan que ver con el sector, sino que en él también tienen cabida cuestiones como la formación. Los profesionales de Formatic Barcelona, una escuela universitaria que se encuentra en la capital catalana, nos han confirmado esta cuestión.
Y es que en esta escuela puede estudiarse, por ejemplo, un grado en Turismo que, desde luego, abre las puertas a trabajar en una de las numerosas empresas turísticas que se sitúan en la ciudad. Además, contar con un estudio de este tipo en Barcelona permite al estudiante conocer de primera mano todo lo que engloba al sector turístico de la ciudad y tener a mano numerosos ejemplos de gestión y de administración de este tipo de negocios. Y eso es realmente importante para poder ofrecer un aprendizaje de calidad, cosa que tenemos que seguir implementando en los tiempos que corren.
Este tipo de asuntos es de una utilidad bastante grande en los momentos que corren. Formando a grandes profesionales, obtendremos grandes resultados de cara al futuro. Y es que este es uno de los secretos mejor guardados de una ciudad como lo es Barcelona. Nadie duda de que realizar este tipo de proyectos es básico para seguir mejorando en lo que tiene que ver con la calidad del turismo en este país, que ya de por sí es bastante buena y es capaz de llamar la atención de propios y también de extraños.
Estamos convencidos de que Barcelona es la mejor ciudad en lo que tiene que ver con la promoción turística de toda Europa. Es cierto que, por ejemplo, ciudades como París o Berlín cuentan con mayores visitantes durante cada año. Pero este tipo de ejemplos son los de ciudades que no necesitan promocionarse porque enamoran solo con su nombre. Barcelona no ha sido escenario, por poner solo un ejemplo, de la II Guerra Mundial. Y aún así es capaz de competir con esas dos grandes urbes que han sido escenarios esenciales de un conflicto de las dimensiones de ese.